Las importantes tareas de green belt en la era digital

El universo empresarial está lleno de anglicismos y neologismos que hacen referencia a nuevos puestos de trabajo, muchos de los cuales han surgido como consecuencia de la era digital en la que nos encontramos, y de la importancia capital que suponen en cualquier trabajo las nuevas tecnologías de la información y la comunicación. Los trabajos tradicionales que se han adaptado a los nuevos tiempos o se encuentran en proceso de cambio sin duda han acelerado sus procesos y sus flujos de trabajo debido a estas cuestiones. Podríamos poner muchos ejemplos respecto a esto, siendo quizá la autoedición en las editoriales, o la importancia trascendental de las redes sociales en la publicidad moderna, algunos de los más destacados. Pero, precisamente porque dichos flujos de trabajo pueden ser difíciles de asumir, también han aparecido profesiones especializadas en su gestión. Entre ellas, la del green belt.

Una persona que tenga interés en aprender al respecto, y tal vez especializarse de veras para ayudar en los procesos de su propia empresa, lo tiene actualmente relativamente fácil: ante todo tiene que buscar un curso de green belt. No son difíciles de localizar actualmente en internet, ya que, como ya hemos señalado, la necesidad básica de gestionar debidamente los procedimientos empresariales para que las tareas salgan bien empieza a ser, por decirlo de manera un tanto dramática, de vida o muerte. El trabajo digital, las labores profesionales en red, suelen ser inmediatas, y eso significa que muchas veces pueden incluso superar la capacidad cognitiva humana. No es imposible de solucionar, pero el green belt, que a continuación siempre puede escoger especializarse en su labor haciendo un master en black belt, se convertirá en una figura clave para que el negocio fluya.

Por último, pero también muy importante, el curso en cuestión está íntimamente ligado al procedimiento del lean six sigma, un proyecto de negocio, también novedoso, creado con el objetivo del control de actividades y la mejora de los resultados. Cada aspecto de las tareas del green belt, las fases de análisis y mejora, de probabilidad y de definición de equipos de trabajo, etc., surge de la mano del Six Sigma.